Vayas donde vayas, cuando se habla de Italia, junto a las palabras habituales «pasta«, «pizza«, «mozzarella» y «espresso» hay otra palabra que los extranjeros conocen muy bien y es «tiramisù«. Sí, porque este delicioso postre en capas es quizás el postre italiano más famoso del mundo y, sin duda, aparece en las cartas de todos los restaurantes italianos del mundo.
La historia
En definitiva, a todo el mundo le gusta y todo el mundo busca su receta, basta pensar que en 2016 fue la palabra relacionada con la comida más buscada en Google en Italia. Pero, ¿te has preguntado alguna vez de dónde procede este delicioso postre con un nombre tan especial?
Dado el éxito del tiramisú, como era de esperar, son muchos los que reclaman ser los autores del postre más popular con queso mascarpone y café.
- La sopa del Duque de Siena en el siglo XVII. Algunos se remontan a la Siena del siglo XVII: con motivo de la visita del Gran Duque de Toscana Cosme III de Médicis, parece que los pasteleros de la ciudad decidieron rendirle homenaje con un pastel hecho especialmente para él. A continuación, prepararon un pastel de mascarpone y café, que se llamó «zuppa del duca» en honor a Cosimo. Aunque se trata, sin duda, de una historia poética y fascinante, parece muy poco probable que en una época tan remota pudieran encontrarse ladyfingers y mascarpone en la ciudad toscana.
- El restaurante El Toulà en Treviso. Parece que los orígenes de nuestro querido tiramisù se encuentran en el noreste de Italia, en una época mucho más cercana a nosotros. De hecho, su cuna mas probable sería el Véneto o el Friuli en un periodo comprendido entre 1935 y 1960. Una teoría bastante fiable es que el tiramisù nació en Treviso. El primogénito de este postre, nacido en torno a los años 60 como una apetitosa variante de la zuppa inglese, es la disputa entre los restaurantes ‘El Toulà’, ‘Al Fogher’ y ‘Le Beccherie’.
- Los orígenes en Friuli. En el libro Tiramisù. Historia, curiosidades, interpretaciones del postre italiano más querido, presentado en 2016 en la Feria del Libro de Turín, las dos periodistas gastronómicas Chiara y Gigi Padovani rastrean los orígenes del tiramisù entre Pieris di San Canzian d’Isonzo, en la provincia de Gorizia, y Tolmezzo, cerca de Udine.
¿Y por qué se llama tiramisù?
Pero la pregunta que todos nos hemos hecho al menos una vez es: ¿por qué el tiramisù se llama así? Parece que el nombre se debe a su alto valor energético: el tiramisù es una bomba de calorías, y esto no se le escapa a nadie. Pero también hay quien dice que el nombre tenía originalmente una intención más pícara, en referencia a sus supuestos efectos afrodisíacos. Se han sugerido unas cuantas cucharadas de este asombroso postre para «animar, levantar» (tirare su) y hacer frente a los placeres del dormitorio.
Esta es una receta del «Cucchiaio d’Argento«
Ingredientes:
- 400 g de mascarpone
- 200 g de bizcochos de solemnidad
- 150 g de azúcar glas
- 200 g de chocolate amargo
- 4 yemas de huevo
- 2 claras de huevo
- 3 tazas de café ristretto
- cacao amargo en polvo
Preparación para 6 porciones:
- Para hacer el tiramisù, comience con la crema de mascarpone. Separar las yemas de las claras y, en un bol, batir las claras a punto de nieve.
- Mezclar las yemas de huevo y el azúcar en otro bol, y mezclar bien con un batidor hasta que la mezcla sea ligera y esponjosa.
- Incorporar suavemente el mascarpone a la mezcla.
- Añadir las claras de huevo a la mezcla, batidas a punto de nieve.
- Cubra el fondo de un plato rectangular de lados altos con una capa de bizcochos de soletilla y cúbralos cuidadosamente con café; alternativamente, sumérjalos suavemente en el café sin empaparlos demasiado antes de colocarlos en el plato.
- Cubrir la capa de ladyfingers con una capa de crema de mascarpone y espolvorear con un poco de chocolate en polvo. Repetir la misma acción hasta agotar los ingredientes y terminar con una capa de mascarpone espolvoreada con cacao amargo en polvo.
- Coloque el pastel en la nevera durante unas tres horas.