LOS GATOS DE ROMA

La presencia del gato en Italia es muy antigua. Se han descubierto monedas del año 500 a.C. en las que los fundadores de importantes colonias estaban ilustrados con la figura de un gato. Hoy en día hay más de 180.000 gatos en Roma y están protegidos por la ley. Son los únicos seres vivos a los que se les permite subir a las ruinas romanas.

Un poco de historia de los gatos de Roma

La Ciudad Eterna se caracteriza por una antigua afición a los gatos que se remonta a la Roma Imperial, cuando el gato era considerado una mascota y un compañero fiel tanto en la vida terrenal como en la extraterrenal. Muchos nombres y apellidos de la antigua Roma derivaban de la palabra latina «gato«. El culto a la diosa Isis (protectora de los animales y especialmente de los felinos), a la que se dedicaban templos en todas las ciudades del Imperio, también contribuyó a reforzar el amor por el gato como animal sagrado e importante. A lo largo de los años, también se dedicaron poemas a los gatos de Roma.

Incluso hoy en día, Roma dedica mucho cuidado y atención a sus habitantes felinos. Paseando por la ciudad, desde el centro hasta los suburbios, se encuentran varias colonias de gatos protegidas y cuidadas por ciudadanos amantes de los animales.

Colonia de gatos de Torre Argentina

La más grande y quizás la mas famosa de la ciudad es la que se encuentra en las hermosas excavaciones arqueológicas de Largo di Torre Argentina, en el centro de Roma. Se trata de una zona sagrada con una historia que se remonta a miles de años atrás, ya que fue el emplazamiento del teatro y de la antigua curia de Pompeyo.

Entre las ruinas de los antiguos templos hay un gran grupo de gatos. De hecho, fue a partir de 1929 (cuando salieron a la luz las ruinas de Largo di Torre Argentina) cuando los gatos callejeros de la capital comenzaron a encontrar refugio entre los antiguos templos y muchos romanos iniciaron la costumbre de traer aquí a sus gatos abandonados. Los «gattari» de Roma son ciudadanos apasionados por estos maravillosos animales y dispuestos a dedicarles tiempo y atención.

Puede leer más en su página web www.gattidiroma.net

Los gatos de la pirámide

Otro lugar fascinante donde se pueden encontrar gatos protegidos y cuidados por voluntarios es el «cementerio no católico» o «cementerio inglés», situado cerca de la pirámide de Cestia, en el barrio de Testaccio. Un lugar mágico y quizás poco conocido de la capital que alberga, entre otras, las tumbas de los poetas John Keats, Percy Shelley, Antonio Gramsci y uno de los cinco hijos de Goethe. Con su espectacular vista de la Pirámide, algunas maravillosas esculturas y el silencio que lo invade, es definitivamente un lugar para visitar. Caminando entre las tumbas te encontrarás con muchos gatos y a la entrada del cementerio podrás hacer una ofrenda para apoyarlos.

Puede leer más en su página web www.igattidellapiramide.it

Si eres amante de los gatos, Roma es una ciudad perfecta para encontrarlos. Te acompañan en todos tus paseos por las calles de Roma e incluso puedes apadrinas a algunos de ellos y así ayudar a mantener su salud y nutrición.